DAVID GILMOUR
Rudyard Kipling fue una figura única en la historia inglesa, un celebrado escritor y un gran icono imperial. Ganó el Premio Nobel de Literatura, añadió más frases a la lengua que cualquier otro después de Shakespeare, y también fue apóstol del Imperio Británico, un hombre que encarnaba una época para millones de personas que no leían poesía habitualmente. Hijo de la era victoriana, Kipling vivió lo bastante para ver cómo el ascenso de Hitler amenazaba la existencia de su país. Su trayectoria fue pareja a la del Imperio y llegó a convertirse en profeta de una decadencia nacional que gobiernos sucesivos no quisieron encarar. Obras previas sobre Kipling se han centrado en su obra literaria y su vida familiar; sin embargo, La vida imperial de Rudyard Kipling es el primer libro que estudia su papel público, su influencia en la manera de pensar de los británicos sobre el Imperio y sobre sí mismos. Basándose en una amplia investigación en Inglaterra y en archivos poco explorados de los Estados Unidos, David Gilmour logra en esta apasionante biografía política «una espléndida y muy necesaria revaluación de Kipling, que lo sitúa firmemente en la geografía política de su tiempo», The Herald.